Condenan la democracia

Uno de los reporteros más reconocidos de la historia del periodismo, Bob Woodward, se ofreció a cumplir parte de la condena que cumple la periodista Judith Miller por no revelar sus fuentes. Fue en uno de los programas con mayor audiencia de los Estados Unidos, el show deLarry King, donde el periodista que desveló el emblemático caso Watergate, junto a su compañeo Carl Bernstein, denunció el ataque frontal a la libertad de información que supone dicha sentencia.

Miller, periodista del New York Times, y con una reconocida trayectoria a sus espaldas, pasa sus días entre rejas desde el pasado 6 de julio. El delito, negarse a revelar sus fuentes al jurado que investiga la filtración pública de la identidad de un miembro de la CIA. A menos que decida testificar, Miller permanecerá en prisión hasta octubre, cuando el jurado tiene previsto terminar su trabajo. Sin embargo, corre el riesgo de que el caso pase a un tribunal y la reportera sea condenada 18 meses más de cárcel.

Mientras, la Sociedad Interamericana de la Prensa hizo público un comunicado en el que se solidarizaba con la periodista y mostraba su preocupación por " el efecto multiplicador, negativo por supuesto, que pudiera tener en el resto del continente". Pero fue el director del periódico peruano "El Comercio", Miró Quesada, el que, sin lugar a dudas, verbalizó lo que todos los periodistas deberíamos convertir en noticia: "Miller está luchando por su propia libertad y por los principios de la prensa".

Es más, la entelequia democrática no existe sin la libertad de información, y sin ésta nuestra profesión no es más que la de voceros y funcionarios del poder.

Fragmento completo de la intervención televisiva de Bob Woodward. Uno de los pocos periodistas que llaman a la Casablanca, y contesta personalmente el telefoneado.

Noticia de agencia: La SIP, preocupada por los efectos que pueda tener el caso de la periodista detenida por no revelar sus fuentes